sábado, 22 de noviembre de 2008

Cinema Paradiso, lo que la censura nos quitó...



Cada vez que veo esta escena recuerdo perfectamente el cine de mi pueblo, ahora convertido en un bloque de apartamentos. Se parecía muchísimo al que aparece en esta película que retrata fielmente lo que el mundo cinematográfico representaba para los niños que vivíamos en pequeñas poblaciones y sólo teníamos como distracción el cine de los domingos, los libros y los paseos en bicicleta por la playa.
Todavía recuerdo aquel celuloide rayado y los saltos en la acción que se ocasionaba cada vez que la 'bendita' censura metía la tijera. A Jacques Perrin, ya adulto, alguien le devolvió todos esos cortes que las mentes pensantes le hurtaron cuando era un niño y ayudaba en la cabina de producción. A nosotros, nadie puede devolvérnoslos.

8 comentarios:

supersalvajuan dijo...

Recuerdos imborrables, tanto o más que el sol naciente.
http://www.youtube.com/watch?v=pRV9QCXLtHQ

Anónimo dijo...

Hola Thelma. Yo no pertenezco a esta dirección de blog, pero por circustancias estoy a tu lado.Estubimos juntas en Balsicas en la exposición de Juan B.Cinema paradiso es un poco la vida de mi marido, y me alegra mucho tus trocitos que ayer nos robaron y tú nos regalas.Un beso.Isis

Cyd Charisse dijo...

Hola, Isis, encantada de saludarte y de que entres aquí. Ya sabes donde está tu casa. Pues sí, en Cinema Paradiso hay un poco de todos nosotros. Y esta escena es de Oscar, por eso se lo llevó, sin duda.

Cyd Charisse dijo...

Super, gracias por tus indicaciones. Sí, imborrables.

Cyd Charisse dijo...

Por cierto, la casa del sol naciente fue una de las canciones de mi infancia. Cuando hace dos o tres años vi a Eric Burdon actuando en San Javier los ojos se me salían de las órbitas...

Aila dijo...

A mi todo esto me deprime. Me imagino a un sórdido y reprimido censor y me da mucha lástima.
Afortunadamente mi vida no ha sido así; he soportado el cine censurado pero siempre con la sensación de que no iba conmigo, que yo, en mi vida privada, no me comportaría así.
Siento una pena infinita por las mujeres que soportaron esa época y por los hombres que tuvieron que buscar, en la prostitución , lo que no encontraban en casa.
No me gusta, lo siento. No me gusta

Sarashina dijo...

Pues sí que fue una época dura, y se soportó y aquí está la gente joven que no puede creer lo que se les cuenta. Es cierto, siempre me digo que se nos escamoteó buena parte de la vida, de la realidad, de las posibilidades del mundo. Pero ahora, ¿a quien reclamamos?

Cyd Charisse dijo...

Cierto, fue una etapa dura y no podemos reclamarle a nadie, pero no me diréis que no es maravilloso que alguien te deje en herencia una vieja caja con los cortes de la desgraciada censura. Yo creo que en esta película muchos nos vimos reflejados en el personaje del protagonista. A mí todavía nadie me ha devuelto la cajita con todo lo que me robaron a lo largo de mi vida.