En primer lugar, me tomo la libertad de poner una foto de Kim Basinger. Buscando imágenes de actrices con teléfono, me salió ésta y claro, si se trata de poner un icono, mejor que sea una señora impresionante y no una servidora, no sea que a más de uno le dé un infarto contemplando los ojos desorbitados y la cara congestionada que se me quedó después de mi experiencia con la empresa supuestamente ex-monopolio de los teléfonos españoles.
La idea de contar esta 'simpática' experiencia me la ha dado mi amiga Anuka y sus impagables diálogos con el teléfono 'autonómico'. Lo mío tiene bastante menos gracia y es una más de las miles o yo diría que millones de reclamaciones que cada día inundan a los telefonistos (lo pongo en masculino porque también hay señores trabajando en esa 'santa' casa, así le doy 'gusto' a la ministra de Igualdad) y telefonistas contratados por la subcontrata de la tercera contrata de una subordinada de Telefónica de Espaaaaañaaaaa, arrrggg.Y aquí empieza el relato:Érase una mañana en la que la subscribe, dama de alto plumero (salud, Aila) y baja fregona estaba poniendo orden en la abarrotada habitación de trabajo. Con el trajín, el mocho de la fregona tropezó con uno de los incontables cables (con rima y todo) que pueblan el lugar y zas, se cayó el router al suelo. No es la primera vez que ocurre, pero, ¡sielos!, esta vez el aparato no volvía a encenderse. Horror, pánico, terror... reinicio, reenchufe, retodo y nada, el susodicho que no encendía las luces.Llega el momento de la llamada fatídica.Marco el 1004-Bienvenido a Telefónica, por favor, si desea información sobre números de telefónos, marque el 11822...
Por favor, descríbanos brevemente el motivo de su llamada....
No la hemos oido bien, por favor, descríbanos...
Por favor...
No la hemos oido...
Os ahorro lo que sigue... es decir, si necesita tal, marque 1, si cuál, marque 2... porque supongo que lo habéis sufrido en vuestras carnes morenas una y otra vez hasta el hartazgo y estáis sobradamente curados de espanto. Cuando finalmente conseguí hablar con un 'operador' me dice que llame a un 902. Lo hago tras superar otros trescientos controles de si quiere tal, marque tal y me dicen que para eso tengo que llamar al 1004. Ah, primero me han solicitado que marque mi número de teléfono para acceder al operador y luego el operador me lo vuelve a pedir, así como mi DNI, mi dirección, mi nombre y apellidos, mi distrito postal, mi ADN y hasta mi grupo sanguíneo, que puestos a pedir, hasta te pido la luna lunera cascabelera.
Finalmente consigo exponer el motivo de mi llamada. El telefonisto, muy simpático, muy chachi y muy guay me dice: Lo siento, señora... (aquí va el apellido) pero usted no tiene el servicio de averías por lo tanto, si le enviamos a un técnico le cuesta 50 euros y hasta dentro de una semana no se lo garantizo.
-Genial, señor telefonisto, pero mire, yo le estoy pagando 100 euros todos los meses a usted para tener una línea ADSL y un servicio técnico y lo hago porque lo necesito para mi trabajo.
-Si yo lo comprendo, claro (¡y un pijo comprendes tú, pienso yo!), pero si quiere, le doy de alta en el servicio, que le costará sólo 5 euros más al mes y en 24 horas tiene usted un técnico. Si yo pudiera, metería la mano por el teléfono y se lo arreglaría, pero por desgracia, no puedo (¿a que suena a letra de bolero...?).
-Pues fale, señor telefonisto listo, apúnteme usted y sea lo que Dios quiera.
(Diálogo sucedido el pasado jueves).
Capítulo II:
Mañana del martes. El router averiado se arregló solo, bastó con apretarle una clavija, pero el telefonisto listo por lo visto no lo sabía y no se le ocurrió mencionarlo. Pero como supuestamente he contratado un servicio de averías, vuelvo a llamar al 1004, ya que me temo que haya sido abducido al subir por el Puerto de la Cadena. Repetición del día anterior... llame al 902, dígame sus datos, etc. etc. etc. etc.
En esta ocasión se me pone una telefonista lista que me asegura que no ha venido ningún técnico porque yo no se había solicitado el servicio por el que me iban a cobrar 5 euros. les digo que eso no es así y me lo rebate. Finalmente afirma que sí, que yo llamé determinado día pero ni idea de por qué llamé porque lo que pedí no se reflejó, mejor llame usted al 1004.
Y llamé al 1004 y resultó que sí, que yo había pedido el servicio, pero que tardaba una semana en activarse y hasta que no se activase el servicio, no enviaban a un técnico, pero eso sí, a final de mes usted me paga los 100 euros más los 5 del servicio y si no puede trabajar con el ADSL, pues se chincha, que para eso somos ¡¡¡¡TELEFÓNICA DE ESPAAAAAAÑAAAAAAA...!!!!
¡¡¡LA MADRE QUE LOS PARIÓ!!!