miércoles, 28 de julio de 2010

El puente de El Estacio y los que se pasan de morrazo

Por una vez voy a romper una regla no escrita de este blog por la que no me gusta comentar temas informativos que tienen que ver con mi trabajo y mucho menos si son conflictivos, pero hoy me voy a saltar mi propio código y mostrar mediante documento fotográfico que la realidad es tozuda y que por mucho que se empeñen unos cuantos, la verdad termina por mostrarse.
He aquí el ejemplo; en los últimos meses hemos soportado una campaña en contra de la medida tomada por el Ayuntamiento de San Javier de no renovar el convenio por el que se hizo cargo del mantenimiento de la apertura y cierre del puente de El Estacio, ya que le empresa concesionaria pretendía cobrar 250.000 euros al año, una cantidad más que respetable especialmente en tiempos de crisis.
La oleada de 'indignación' que la medida suscitó entre los propietarios de los veleros -únicos barcos que necesitan que el puente se levante para pasar del Mar Menor al Mediterráneo- llevó consigo una serie de declaraciones a cuál más vergonzante por parte de sectores no poco interesados, que pintaron una situación catastrófica para el sector turístico que sin el levantamiento del puente poco menos que iba a producir la hecatombe mundial.
Finalmente el Ayuntamiento aprobó una moratoria por un año a la espera de que los demás ayuntamientos del Mar Menor, los clubes náuticos y todas las instituciones que se benefician -es un decir- de la apertura del puente pongan su contribución al cazo común y no tengamos los ciudadanos de San Javier que sufragar con nuestros impuestos las vacaciones de cuatro churubitos, que son los que cruzan el canal para irse de cuchipanda por alta mar.
Mientras llega ese momento, el puente se abre cada dos horas para deleite de unos cuantos y cabreo de unos muchos. Estas fotos fueron tomadas durante la apertura de las 12 del mediodía ¿hora punta para los veleros?.
En la primera foto, los coches esperan pacientemente a que se cierre el puente para acceder a la zona norte de La Manga.


El puente, erguido ¿cuántos veleros cruzan el canal? ¿alguien ve alguno...?

El puente, a punto de cerrarse, ni sombra de veleros, sólo pasa una lancha que no tiene problemas por su altura.

Puente a punto de cerrarse, sigo sin ver los veleros.

El puente cerrado, los coches por fin pueden pasar de una a otra zona... el monumental atasco se diluye.
Y colorín colorado, la demostración ha terminado.
Que el morrazo de algunos llega hasta El Estacio.


5 comentarios:

windi dijo...

Soy sufrido poseedor de un humilde velero.

No me doy por aludido en lo de "morrazo", ya que siempre he abogado por una apertura "bajo demanda".

Creo que esa secuencia fotográfica sólo demuestra que el operador de la torre de control del puente de El Estacio no ha recibido órdenes de nadie entendido en cómo funciona la náutica de recreo.

Me explico: si yo tengo intención de pasar por el puente de las 12 (cosa que es incierta, porque las aperturas que ha decretado tu querida alcaldesa son a horas impares), me aproximo al canal cuando faltan unos minutos para la hora de apertura (si no lo hago, no me da tiempo a pasar, porque un velero es una embarcación lenta). Luego si el operador del puente ve que no hay veleros en la zona (y para eso tiene una posición privilegiada en altura, que le permite divisar los veleros que se aproximan), no debería abrir ni causar perjuicios a los vehículos que tratan de pasar el puente por arriba.

¿Qué sentido tiene hacerles esperar si no va a pasar nadie?

Para mayor seguridad, del mismo modo que llama por radio para decir "se va a proceder a la apertura", puede llamar para preguntar: "¿algún barco interesado en abrir el puente a las 12?" Y, en caso de respuesta negativa, no abrir.

Un servicio así no perjudicaría a nadie. Pongamos por caso que se optase por aperturas cada hora "si hay demanda". Es posible que en muchas ocasiones no se abriría. Igual que en la actualidad no se abre, pese a ser la hora, cuando hay que atender alguna emergencia.

Y, ya que hay personal que lo atiende, se puede racionalizar el servicio. Basta con un poco de sentido común y flexibilidad, que a veces parecemos robots.

Es como cuando uno circula en pleno mes de enero por La Manga y se cierra un semáforo, porque toca, pero nadie pasa porque parece la ciudad fantasma. Sólo que en este caso es comprensible, porque son automatismos sin nadie que los dirija.

Cyd Charisse dijo...

Windi, muchas gracias por tu más que sensato comentario. Yo no me quejo de que exista el puente ni de que se abra ni de que los afortunados que tienen velero crucen de uno a otro mar cuantas veces quieran y puedan. De lo que me quejo es de que tengamos que ser los ciudadanos de San Javier los paganos de un servicio por el que no recibimos ni un puñetero euro. A ver ¿no se paga por pasar el canal de Panamá...? ¿y los peajes de la autovía?. El usuario también debe amoquinar, digo yo y si se está pagando a un club náutico, que todos pongan su parte. Es razonable ¿no te parece?.

Cyd Charisse dijo...

Por cierto, esa secuencia fotográfica recoge el momento en el que UN VELERO, UNO SOLO, había pasado bajo el puente, pero no está en cuadro, ya se había marchado.

windi dijo...

La verdad, leyendo frases como "¿Alguien ve alguno?" da la sensación de que se había hecho una apertura del puente robótica, para nadie, porque "tocaba"...

Si había un velero, ya se justifica. Quien no navega no sabe lo que puede ser esperar ahí fuera para entrar con temporal durante dos horas o una noche según los casos.

Cronológicamente, primero estaba el canal. El puente se creó para dar acceso por carretera a la zona Norte de La Manga. Se suponía que el IBI de las nuevas construcciones de la zona justificarían el gasto de mantenimiento de algo que nunca debió ser puente, sino túnel.

Y el beneficiado por el IBI de esas construcciones es el Ayuntamiento de San Javier.

Por otro lado, estoy convencido de que si el "boom" inmobiliario de La Manga se estuviera produciendo ahora, y no hace 50 años, los grupos ecologistas no habrían permitido construir nada desde El Estacio hacia el Norte, no se habría hecho puente ninguno, los barcos entrarían y saldrían a su antojo y la zona habría quedado como un espacio protegido como la zona de La Llana.

(Da gusto dialogar con quien, pese a tener puntos de vista diferentes a los tuyos, es capaz de abrir la mente a comentarios opuestos. Gracias por ello)

Cyd Charisse dijo...

Tienes razón, windi, yo sé que los clubes náuticos y los puertos querían un túnel y no un puente, pero en los años del boom ladrillero, el alcalde pensó que todo estaba justificado, al fin y al cabo el sector en el que él trabaja, que es la construcción, no paraba de invadir la zona norte por entonces. Nadie pensó que llegarían las vacas flacas pero ahí están y el marrón que se está tragando la actual corporación es de antología.
Ah, y que no quede esto como un ataque al sector velero, que yo soy de La Ribera y me encanta el mar y los barcos. Lo que pasa es que si hay que reducir costes, que sea de todas partes, no se debe hacer discriminación con los veleros con el pretexto de que atraen turismo... que eso habría mucho que hablar.