Érase una vez un pequeño pueblo enclavado en plena Sierra de Escalona, a medio camino entre Pilar de la Horadada y Orihuela -más o menos- reconvertido en un precioso complejo hostelero. Su nombre: restaurante Rebate. La familia propietaria lleva muchos años restaurando, en todos los sentidos, este precioso lugar en el que tuvimos el privilegio de ser invitados el pasado 11 de marzo con motivo de la inauguración de la bodega y la tienda de productos ecológicos, que completan la oferta del establecimiento.Allí nos encontramos muchos compañeros de los medios de la zona, que fuimos recibidos con un espléndido aperitivo. La boca se me hace agua sólo de recordarlo.
Marta, en plan anfitriona, demuestra que en esto de hablar con los invitados no tiene rival, jajaja.
Escuchando las explicaciones de los expertos de la cosa vinícola del campo de Cartagena. Buenísimos todos los caldos. Probamos seis distintos y un cava o mejor, un vino espumoso, totalmente ecológico.
Marta, en plan anfitriona, demuestra que en esto de hablar con los invitados no tiene rival, jajaja.El comedor se ubica en la antigua escuela del pueblo. Se han respetado las paredes originales y el diseño, de lo más acogedor.
Escuchando las explicaciones de los expertos de la cosa vinícola del campo de Cartagena. Buenísimos todos los caldos. Probamos seis distintos y un cava o mejor, un vino espumoso, totalmente ecológico.Todos expectantes, escuchando las características de los vinos.
Y el menú... pues mira, sobresaliente cum laude.
Y si se han quedado con la curiosidad y las ganas... ahí va el enlace de la página web:
http://www.facebook.com/RestauranteRebate.
El que pueda, que no deje de visitarlo, me lo agradecerán.











